Creando un puente con triángulos y otro con cuadrados
Cuando hacemos un viaje fuera de casa, frecuentemente podemos observar puentes de acero prefabricados. Su estructura está conformada en su ma- yoría por triángulos. Podemos preguntarnos qué hace que los triángulos sean especiales, ¿por qué no paralelogramos?
Resulta que el triángulo es el único polígono que no se deforma. Cualquier otro polígono en una estructura no será rígido, sino hasta que utilicemos triángulos.
Cortemos el tubo de cartón de extremo a extremo, y extendámoslo sobre una superficie plana. Cortemos 10 tiras de cartón en el extremo más corto. Con la cinta adhesiva, peguemos dos tiras en tres puntos igualmente espaciados, así obteniendo 5 tiras de cartón gruesas. A 4 de estas tiras les doblaremos los extremos hacia adentro. De esta manera se obtienen cuatro piezas de cartón con extremos doblados, con las cuales construiremos un paralelogramo al unir cada una de las esquinas con cinta adhesiva.
En cualquiera de los lados, vamos a colocar un pedazo de cinta adhesiva para pegar nuestro paralelogramo a una superficie plana, sobre un pedazo de cartón, una hoja de papel, o la misma mesa.
Ahora empujaremos con el dedo la estructura que hemos construido en cualquiera de las dos esquinas superiores. ¿Qué sucede? El paralelogramo se deformó, por lo cual comprobamos que no es geométricamente rígido.
¿Cómo podemos obtener una estructura rígida? Pues, ¡utilizando triángulos! Nos queda una tira de cartón plana, la cual colocaremos en las esquinas opuestas del paralelogramo, formando una diagonal. Hemos obtenido dos triángulos. Volvamos a empujar la estruc- tura en cualquiera de las dos esquinas superiores. ¿Qué sucede? Los triángulos aportaron rigidez, soporte y estabilidad. La estructura no se deforma.
¿Qué hemos aprendido?